El país donde existen las "Kravall"

Hoy es jueves, bueno, ya no, ya es viernes... Pero como otros muchos jueves por la noche ha habido "Kravall". Hoy, a diferencia de otros muchos jueves hemos ido. Las "Kravall" son una cosa que otro día explicaré. Hoy, no viene a cuento.

Sí que diré que las "Kravall" son una de esas cosas que los suecos hacen bien, y donde les podemos ver como son, sin anestesia, de fiesta y pasándolo bien a su manera... Realmente esto no es más que otra fiesta para nosotros, una más que añadir a la lista, y que con un poco de suerte habrá dejado alguna que otra anécdota...

Pero si te fijas, observas un poco lo que la gente hace, y hablas, te puedes dar cuenta que una "Kravall" es dónde se bebe, se ríe, se baila, se disfruta, se piensa, se añora, se confiesa, se recuerda, se reincide, se aparece, se desaparece, se dice y se escucha, se conoce, se piensa... Como cualquier otra fiesta vamos... Sólo que hoy me he fijado y he visto esto y mucho más, aunque a estas horas ya no me acuerde de muchas cosas.

Una noche de fiesta de Erasmus en Suecia se puede convertir en esa en la que acabaste en el McDonald's a las 4 de la mañana, en la que te metiste en un lío o en la que hablaste más de la cuenta. En la que te arrepentiste o en la que conociste a alguien. En la que la gente te miró preguntándose a donde ibas, o peor aún, que hacías con ese o esa... En la que volviste a caer o te subiste, otra vez, a la tarima. En la que hiciste algo como para que al día siguiente los demás te preguntaron en que estabas pensando, o en la que mandaste aquel mensaje. También es cuando aquel mensaje no llegó a tiempo, o cuando echas de menos a los que ya se han ido, o están a punto de irse... Puedes hacer volteretas en la nieve, o incluso el pino.

Y es que, llegados a este punto, cuando el año deja de ser nuevo y febrero asoma las orejas, hay gente que empieza a hacer la maleta porque se va. O hay gente que ya se ha ido. Y es que esto también es parte del Erasmus. Aquel que se resiste a entender que este modo de vida es insostenible, dura medio o un año, y que después se acaba, es que no ha aprendido nada. El final de esto es parte del aprendizaje, y entenderlo es básico. Pasar página y entender que esto no es para siempre te hará más maduro, y te ayudará a recordar aquellos meses como, posiblemente, los mejores de tu vida.

Los que nos quedamos, os echaremos de menos, o os estamos echando de menos a estas alturas. Cuando uno sale de fiesta, se reúne con "todos", y se da cuenta de que hay gente que ya no está, es cuando ve que va echando de menos a esas personas, aquella realidad que entre todos creamos desde cero, y que en muchos aspectos, ya no existe.

No diré a quien echo o voy a echar de menos, pero los o las que marcháis o marchasteis ya lo sabéis, y si lo dudáis, no lo hagáis más, porque seguramente también os eche de menos.

Nosotros aquí, seguiremos como siempre.

Esperamos vuestra visita.